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Estudiantes diseñaron y construyeron prototipos de autos karts

Actividad involucró a las carreras de Ingeniería Civil Eléctrica e Ingeniería Civil Mecánica, que conformaron grupos interdisciplinarios para construir los vehículos.

Una entretenida carrera de vehículos karts que permitió poner a prueba las habilidades para trabajar en equipo y el conocimiento adquirido durante el segundo semestre, fue la actividad de cierre del año académico de estudiantes de la Facultad de Ingeniería.

“Esta carrera representa la finalización de un módulo integrado entre Ingeniería Civil Mecánica e Ingeniería Civil Eléctrica, donde debieron diseñar y construir sus prototipos de autos tipo kart, con los que posteriormente debieron competir, para demostrar si cumplían con los requisitos técnicos que se les solicitó”, explicó el académico Gonzalo Pincheira, quien fue corresponsable de la actividad.

Sobre la experiencia, el estudiante de Ingeniería Civil Mecánica, Aaron Gajardo, relató que “tuvimos que realizar la selección de materiales reciclados para participar de una competencia de carreras de autos karts artesanales, los que construimos con nuestros compañeros de Ingeniería Civil Eléctrica”.

Señaló que el principal desafío fue diseñar el vehículo desde la óptica de ambas disciplinas, y desde los componentes más básicos, como el sistema de transmisión, de dirección, y evaluar las opciones de batería, así como seleccionar los materiales y tipo de motor.

Los karts son vehículos terrestres motorizados, para un/a único/a piloto, de 4 ruedas, con una potencia variable, sin suspensiones, con o sin carrocería y que son utilizados como entretenimiento o bien en competiciones deportivas que se han popularizado en Chile y en el mundo.

Características técnicas

El profesor de la Escuela de Ingeniería Civil Eléctrica y responsable de la actividad, Carlos Muñoz explicó que los/as estudiantes debieron cumplir con exigencias básicas, las que fueron evaluados por ambos docentes. “El vehículo debía funcionar con tracción eléctrica y mediante un motor eléctrico, además, debía contemplar cableado y un convertidor”, indicó.

El coche debía tener la capacidad de realizar tres circuitos completos, en las calles de circulación internas de la Facultad.

Para el académico el balance de la actividad fue positivo, considerando que el módulo tenía una componente de trabajo interdisciplinario. “A pesar de ello, los estudiantes lograron comunicarse bastante bien, lo que les permitió llegar a un buen resultado”, concluyó.