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¿Cómo captar y retener el capital humano que la región necesita?

Orientar la formación de capital humano con la mirada puesta en una segunda generación de productos agrícolas. Ése es el enfoque que, en el caso de la Región del Maule, propone el politólogo suizo, Claude Auroi, a la hora de vincular las potencialidades regionales con el capital humano que se requiere para su desarrollo.

Doctor en Ciencias Políticas, profesor e investigador del Instituto de Altos Estudios Internacionales y del Desarrollo de la Universidad de Ginebra, Suiza, Auroi realiza una pasantía con apoyo de CONICYT en nuestra Universidad, inserto en los ejes de investigación del Instituto de Desarrollo e Investigación Educacional (IIDE).

Emprendimiento

Auroi está interesado en establecer cómo se concilian aspectos como la descentralización y la dotación de capital humano. Cauteloso respecto al estudio que desarrolla, esboza que la Región del Maule se podría potenciar más a nivel de emprendimiento empresarial y lograr una mayor vinculación de los centros de formación de capital humano y de talentos, hacia el mundo de la empresa.

Esto, sin dejar de considerar que la especialidad del Maule aún está bastante ligada a la agricultura y a la agroindustria, lo que, a su juicio, implica pautas especiales, diferentes a las regiones en las cuales predomina la industria.

“Chile es un gran exportador de productos agrícolas y, seguramente, hay que seguir con eso. Pero se puede pensar en una segunda generación de productos y habría que ver cómo enfocarlo”, afirma.

Una de las acciones concretas de su estudio, consistió en la reciente aplicación de una encuesta a dos grupos de estudiantes de la Universidad (de magíster y de pregrado), que buscó determinar cómo ellos sienten o miran su región y cómo perciben los niveles de salud, educación y fuentes de empleo. “También si tienen algún apego a ella, si se identifican con ella”, dice el investigador.

Opciones distintas

Las respuestas están en proceso. Sin embargo, Auroi considera que, a diferencia de muchos países, Chile ha focalizado su dotación de capital humano a través de la formación al interior de sus fronteras, más que por la vía de la atracción de talentos externos.

“Vamos más hacia lo nacional-local, que hacia el extranjero”, apunta. “No digo que es un bien o un mal, tendría que estudiarlo más en detalle. Pero, por ejemplo, en Suiza no alcanza el capital humano local. Es decir, ya no hay posibilidades de incrementarlo, porque está a full. Hay que traerlo desde fuera: alemanes, franceses, italianos. Normalmente, los países tratan de atraer talentos con varios incentivos. Estados Unidos es un caso bien conocido. Entonces, son dos políticas diferentes”, explica.

También destaca que en América Latina hay muchos talentos que no son utilizados, lo que no ocurre en Chile. “La gente acá está en una posición bastante buena, si se compara con otros países de América Latina, porque hay un esfuerzo tremendo que hacen los gobiernos para tratar de tener centros de competencia y, en general, fomentar la educación superior y la capacitación también”, sostiene.