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Con la firma de la denominada Carta de Río de Janeiro 2014, que contiene diez compromisos destinados a mejorar, modernizar e internacionalizar la educación superior, se dio por finalizado el III Encuentro Internacional Universia, que congregó a mil 103 rectores de 33 países, quienes debatieron en torno a “La Universidad del siglo XXI: una reflexión desde Iberoamérica”.
Tras participar de la cita, el rector de nuestra Corporación, Álvaro Rojas —quien formó parte del Comité Ejecutivo del Encuentro— valoró la realización de este tipo de reuniones, por cuanto dijo que en un escenario globalizado como el actual, el conocimiento no tiene fronteras, menos aún, para un país abierto al mundo como lo es Chile.
“Ante esta realidad es de vital importancia estrechar vínculos, conocer lo que está pasando en otras latitudes y cómo las universidades, en especial aquellas de más complejidad, lograron consolidarse como un actor fundamental en el proceso de desarrollo de las sociedades en que se encuentran insertas”, afirmó.
En ese contexto, Rojas sostuvo gracias a estas actividades es posible intercambiar valiosa información sobre los procesos experimentados en instituciones de todo el mundo.
“Si bien es una institución nueva respecto del concierto nacional e iberoamericano, la Universidad de Talca ha logrado posicionarse como un referente en materia de excelencia académica, de manera que podemos aportar con nuestra experiencia y, a la vez, aprender del camino recorrido por otras casas de estudio con el fin de seguir avanzando en materia de calidad”, comentó.
Hoja de ruta
Elaborada en torno a una reflexión colectiva sobre el presente y el futuro de las universidades iberoamericanas, sus insuficiencias y potencialidades, y sobre las necesidades y aspiraciones de las sociedades de la región en el siglo XXI, la Carta Universia Río 2014 se planteó como “una estrategia común de actuación en torno a las claves, propuestas y compromisos recogidos” durante el desarrollo del Encuentro.
En ese sentido, durante la ceremonia de clausura de la actividad —que se realizó los días 28 y 29 de julio—, el presidente de Universia, Emilio Botín, destacó que el documento “representa no solo una declaración de principios, sino una magnífica ‘hoja de Ruta’ para que la universidad iberoamericana juegue un papel determinante en los próximos años”.
“El mundo se encuentra inmerso en un profundo proceso de cambio, en un salto cualitativo y cuantitativo sin precedentes, en el que la tecnología, las relaciones sociales y la globalización son ejes estructurales”, planteó Botín.
“Sin duda alguna, la Universidad debe jugar un papel activo y determinante, retomando el protagonismo social y económico que le corresponde. Y para ello, debe conseguir ambición en el diseño del proyecto educativo e investigador; flexibilidad institucional y organizativa; mayor creatividad, para conseguir sus objetivos y sobre todo compromiso y determinación”, agregó.
Botín cerró su intervención con un llamado para que las autoridades académicas se transformen en los principales promotores de la carta.
“En los próximos meses, son ustedes, rectoras y rectores, los que deben trabajar fuertemente en la difusión de las conclusiones de este Encuentro y en hacer que la Carta de Río se conozca en las Instituciones, administraciones públicas y empresas y se desarrollen planes concretos y calendarios de implementación”, señaló.
