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Por su contribución al desarrollo de la Universidad y su destacada trayectoria académica, nuestra Casa de Estudios —con aprobación de la Junta Directiva— distinguió con la Medalla Profesor Emérito al académico del Instituto de Matemática y Física, Ricardo Baeza, y al ex decano de la Facultad de Ciencias de la Salud, Carlos Gigoux.
El reconocimiento se otorgó durante la ceremonia del 33° aniversario de la Universidad, realizada en el Campus Talca.
“Que me nombren profesor emérito es un honor tremendo, algo importante y muy grato”, expresó Ricardo Baeza, sobre el homenaje que la Casa de Estudios la confirió.
El científico —Premio Nacional de Ciencias Exactas 2009, miembro de número de la Academia Chilena de la Ciencias, y de la American Mathematical Society— recordó que su vida en torno a la matemática se inició a los 18 años de edad, cuando viajó a estudiar a la Universidad de Hamburgo, en Alemania. Luego realizó su Doctorado en Matemática de la Universidad de Saarland, en el mismo país europeo, y desde 1976 es profesor de esa ciencia.
Fue académico de la Universidad de Chile durante dos décadas y hace 14 años integra el Instituto de Matemática y Física de nuestra Casa de Estudios. “Llegué el año 2000 a la Universidad de Talca”, dijo con emoción el científico de 72 años, quien es reconocido a nivel internacional por sus investigaciones sobre estructuras de formas cuadráticas sobre anillos semilocales, que son parte de la geometría algebraica.
“Una de sus mayores satisfacciones en la Institución, es haber contribuido a que el Instituto del cual es parte, haya logrado prestigio a nivel internacional. “Es un Instituto respetado, en todas partes nos conocen e invitan a nuestros académicos a dar conferencias. Esto constituye un tremendo reconocimiento. Además, tenemos muchos postdoctorantes de distintos países realizando estadías de investigación”, explicó Baeza.
El docente continúa formando generaciones de estudiantes, pero desde este año también imparte clases a los alumnos de la carrera de Pedagogía en Educación Media en Matemática, del Campus Linares.
“La mayoría de los científicos cuando pasan cierta edad comienzan a interesarse también por enseñar concretamente para mejorar la educación. Yo estoy en esa etapa de dejar un legado en la educación de la matemática. Eso es importante, porque es como una retroalimentación”, afirmó.
Carlos Gigoux
“Es una sorpresa enorme, un honor y me siento muy emocionado”, dijo el ex decano de la Facultad de Ciencias de la Salud, Carlos Gigoux, sobre su nombramiento como profesor emérito.
Su distinción fue motivo de alegría y recuerdos de gratitud entre los miembros de esa Facultad, la cual dirigió durante 15 años.
Gigoux se tituló en 1957 como cirujano dentista en la Universidad de Concepción. Realizó un postgrado en patología oral, en la Universidad de Illinois, Estados Unidos. Se desempeñó en diversos cargos como académico y director de los departamentos de patología de las U. de Concepción y de Chile, junto con participar en organizaciones gremiales y científicas. Fue vicepresidente de la Sociedad Odontológica de Concepción y miembro del Consejo General del Colegio de Cirujanos Dentistas de Chile. Por su calidad profesional y experiencia académica, ha sido invitado a dictar conferencias en Estados Unidos y diversos países de Latinoamérica.
A la Universidad de Talca llegó en 1995, el mismo año que se creó la Facultad de Ciencias de la Salud y la carrera de Odontología, las cuales a él le correspondió iniciar. Tras 50 años de ejercicio profesional como cirujano dentista, Gigoux es reconocido por haber participado en la creación de nuevas carreras que hoy son parte de la Facultad de la Salud más grande del país, de acuerdo a la cantidad de programas de pregrado que imparte.
“Cuando yo llegué sólo existía Tecnología Médica y con apenas seis profesores. A mí me correspondió apoyar la consolidación de esta carrera que hoy es una de las mejores del país”, dijo. También impulsó las especialidades odontológicas y el Magíster en Ciencias Biomédicas.
“La Universidad de Talca me dio la oportunidad de desarrollar una labor académica que significó la creación de Odontología, Kinesiología, Fonoaudiología y Medicina. Por lo mismo, recuerdo a la Institución con un sentimiento de gratitud y mis años como decano fueron una forma de retribuir lo que me ha dado mi profesión, contribuyendo a la formación de jóvenes”, expresó.
A casi cinco de su alejamiento de las aulas, Carlos Gigoux dijo que su visión actual de nuestra Casa de Estudios es “una universidad muy pujante, con mucho ímpetu y fuerza, que va a llegar muy lejos”.
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