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Ya se encuentra en marcha un completo Plan de Acción que incluye una serie de medidas y acciones dirigidas a transformar el Campus Santiago en un espacio sustentable.
El proyecto —concordado entre las direcciones de, Responsabilidad Social Universitaria (RSU), del mencionado Campus y de Planificación— se desarrolló en el marco del Acuerdo de Producción Limpia (APL) que fue firmado entre nuestra Corporación y el Consejo Nacional de Producción Limpia.
Compromiso Institucional
El APL abarca ocho dimensiones: sustentabilidad, responsabilidad social, consumo de agua y energía, capacitación, huella de carbono, gestión de residuos, seguridad y salud ocupacional.
Según explicó el director de RSU, Rodrigo Ramírez, el APL permitirá a nuestra Casa de Estudios transitar hacia la sustentabilidad, abarcando acciones sobre las áreas que conforman lo que hoy en el mundo se entiende como una “Universidad Sustentable”. Se trata del compromiso institucional, el diseño curricular y la operación del Campus.
“Estamos ante la oportunidad de asumir un nuevo liderazgo en este ámbito que se ha ido instalando como prioritario en la sociedad chilena, y es aquí donde quisiéramos apelar a cada uno de lso integrantes de esta comunidad universitaria para que se sumen, participen y colaboren en la implementación de esta gran tarea institucional”, afirmó.
En ese sentido, precisó que una de las premisas del APL Campus Sustentable, es que entiende el rol de las instituciones de educación superior en el proceso de formación de ciudadanos responsables.
“Por un lado son sus egresados quienes toman las decisiones públicas y privadas que gravitan en los impactos ambientales de la sociedad y, por otro, son sus aulas el lugar donde se debe generar el conocimiento científico que nos permita mitigar los efectos de aquellas actividades que, por mucha conciencia que se logre generar, seguirán siendo frecuentes, ligadas a las formas tradicionales de producción y consumo insustentables de nuestra sociedad”, planteó.
Oportunidad única
En esa línea, el director de Planificación, Pablo Villalobos, destacó que la suscripción del APL “nos compromete con nuestro entorno, la comunidad universitaria y nuestros socios estratégicos”.
Agregó que abre una oportunidad única para seguir avanzando decididamente en los mejoramientos necesarios que permitan concretar la aspiración de un Campus Sustentable.
“Para ello es indispensable profundizar nuestros esfuerzos en la incorporación de la sostenibilidad en los programas académicos, la medición de la huella de carbono corporativa, el fomento de la recolección diferenciada de residuos y el cumplimiento de umbrales de reducción en los consumos de electricidad y agua”, afirmó.
“Nuestra Corporación ha sido pionera en muchas iniciativas relacionadas con la gestión ambiental. Sin duda alguna, con la concreción de las metas comprometidas en este acuerdo, continuaremos en dicha senda”, enfatizó.
Campus Santiago
El director del Campus Santiago, Patricio Sánchez, junto con valorar que el tránsito para convertir a la Corporación en una universidad sustentable haya partido desde el plantel capitalino, destacó la señal que se envía a la comunidad.
“Estamos tomando las medidas apropiadas para mitigar los impactos que generamos en el medio ambiente. Además, somos una institución pública, que educa. Y en la educación las acciones que adoptemos son ejemplo para nuestros estudiantes, o sea, del momento que ellos, por ejemplo, reciclen la basura o se preocupen de la luz que está encendida en la sala de clases, entonces también estamos educando”, aseveró.
Sánchez informó que el Plan de Acción contiene una serie de medidas que son relevantes para el quehacer de las operaciones diarias, las cuales debieran estar operativas en el transcurso del próximo año.
“Lo más elemental es el reciclaje de la basura, pero también cuánto consumo energético tenemos, que la cantidad de agua que se gasta sea cada vez menos, sensores en las ventanas para que el aire acondicionado efectivamente funcione con ventanas cerradas. En fin, hay una serie de medidas que establecer para que el campus pase de ser una operación, a una universidad con un campus en donde efectivamente nos preocupamos del medio ambiente”, explicó.
