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CTSyC alcanza certificación internacional por calidad de gestión

En el Centro Tecnológico de Suelos y Cultivos de la Facultad de Ciencias Agrarias, todos trabajan de igual a igual; desde su gerente hasta el funcionario que lava los instrumentos.

Todos, profesionales que a diario desarrollan una labor de servicio a la comunidad, sello distintivo y mérito suficiente para alcanzar la Certificación ISO-9001-2008,obtenida recientemente por esta unidad de nuestra Casa de Estudios.

Y motivo de orgullo para Juan Castro, gerente del CTSyC, quien de entrada aclara que
“las flores” son para todos y cada uno de los que allí se desempeñan.

“Hoy en día, todas las empresas están requiriendo que sus proveedores de servicios estén bajo un sistema de certificación que les permite asegurarse, desde que ponen una orden de compra hasta la obtención de un resultado”, explica Castro.

“Esto nos enorgullece como centro. Nos permite garantizar calidad, tiempo de respuesta de los resultados. Como personal estamos en constante capacitación y en constante entrenamiento”, agrega.

¿QUÉ ES ISO?

Las normas ISO-9001 es un conjunto de normas sobre calidad y gestión continua de calidad, establecidas por la Organización Internacional de Normalización (ISO). Se aplican a cualquier tipo de organización o actividad orientada a la producción de bienes o servicios.

“En el fondo es un aval a un sistema de gestión implementado, por el centro en este caso, en el que todas las actividades involucradas, desde la recepción de la muestra,hasta la entrega del informe de análisis, que es nuestro producto, es de calidad”, precisa Alejandra Pérez, encargada del sistema de gestión del CTSyC.

La certificación alcanzada por el Centro Tecnológico de Suelos y Cultivos tiene una vigencia de tres años. Durante ese tiempo, la unidad debe someterse a un seguimiento anual, además de mediciones comparativas trimestrales con más de mil laboratorios a nivel mundial.
Por ello, el esfuerzo debe ser constante y de permanente mejora.

“Para la validación participamos trimestralmente en una ronda internacional, donde nuestros resultados se comparan con mil 500 laboratorios a nivel mundial”, señala Pérez.

PRESTIGIO GANADO

Además de la certificación alcanzada, los profesionales del CTSyC trabajan para validar la norma chilena 17.025, sobre competencias del laboratorio.

“Ahí está el desafío. Existen dos laboratorios a nivel nacional con esa norma, esperamos ser los terceros y con eso ya poder abarcar un nicho que no hemos podido logra por diferentes razones”, explica Juan Castro.

Importante desafío si se piensa que el centro presta servicios a pequeños agricultores con el análisis de suelos. La línea de investigación es también su fuerte. Pese a las dificultades que generó el terremoto de febrero de 2010, la respuesta del centro ha sido satisfactoria.

Sobre esa base la proyección no deja de ser ambiciosa y la certificación alcanzada abre
mayores posibilidades de dar con esos objetivos.

“Hoy estamos abarcando a todos aquellos pequeños agricultores asociados a los programas del INDAP y algunos que van por la línea del SAG, que requieren de nuestros servicios. El fuerte de nosotros es la Región del Maule y una parte importante de la Sexta (Región)”, sostiene el gerente del CTSyC.

La eficiencia de la gestión permite al CTSyC profundizar la producción de servicios. Y
también la línea investigativa.

La certificación ISO-9001 2008 es hoy un fiel garante de calidad y lo convierte en la segunda unidad de nuestra Casa de Estudios en obtenerla,
luego del Centro de la Vid y el Vino.

Un plus que se suma al hecho de pertenecer a una Institución como la UTALCA, marcada por su excelencia académica y su potente rol de servicio público.

“Lo que nos diferencia es que la Universidad tiene su prestigio ganado, la Facultad de Ciencias Agrarias está bien posicionada a nivel nacional, lo que nos permite llegar a nuestros clientes no como una empresa, si no como una institución de educación superior”, sentencia Castro.