Expertos analizaron los efectos de la reforma tributaria en la economía

18 Julio 2014

La Reforma Tributaria, desde los primeros debate en torno al tema, hasta las últimas modificaciones en el Senado, abordó un seminario sobre los efectos económicos de este proyecto, organizado por la Facultad de Economía y Negocios (FEN) y el Centro de Desarrollo Empresarial (Cedem) de nuestra Universidad.

Numerosos asistentes del mundo académico y empresarial siguieron las exposiciones que estuvieron a cargo del economista Rodrigo Saens, académico de la FEN, y Sergio González, contador público y auditor y magíster en Planificación y Gestión Tributaria, de la Universidad de Santiago.

Saens se refirió al camino recorrido por la iniciativa y se refirió también a los principios que, en su opinión, debería tener un sistema tributario que se considere óptimo y respecto a los principales puntos de acuerdo que se lograron en la Cámara Alta.

“Uno puede decir que el acuerdo es bastante mejor que lo que había, pero no hay que perderse en esto: los impuestos van a aumentar, en general de un 20 a un 25 o 27 por ciento para las empresas, dependiendo de si se acogen o no al sistema de renta atribuida. Son tres puntos porcentuales del producto interno bruto lo que se pretende recaudar y eso indudablemente va a tener un efecto sobre la actividad económica, al menos en el corto plazo”, expresó Rodrigo Saens.

Según el académico, no es posible precisar con exactitud el efecto de la reforma “y yo no me atrevería a dar ninguna cifra, pero sí claramente habrá un efecto. La evidencia internacional así lo demuestra cuando se aumentan los impuestos, sobre todo en la magnitud en que se está proponiendo”.

Observó, asimismo, que son muchas las aristas que intervienen en el problemay no hay ningún estudio hasta el momento que indique, a ciencia cierta, la magnitud de ese efecto.

Sergio González, a su vez, llevó a números los posibles impactos de la reforma, con el fin de precisar las consecuencias para distintos rangos en diversos contribuyentes. Abundando en este aspecto, sostuvo que “si la recaudación tiene el destino que se quiere dar, obviamente va a provocar un impacto positivo en términos sociales, pero las empresas y los contribuyentes tendrán que soportar el peso de esa carga tributaria”.

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