Geriatría: faltan especialistas en el Maule

22 Septiembre 2014

En la Región Del Maule, de acuerdo a cifras del Ministerio de Salud, el 93,3% de las personas de 59 años en adelante están afiliados al sistema público, es decir, 141 mil 837 personas se deben atender principalmente en los Servicios de Salud Primarios (SAPUS) y en los hospitales, donde actualmente no existe un gran número de médicos geriatras. Consultado el Servicio de Salud del Maule (SSM) al respecto, no entregó cifras específicas sobre esta situación, pero sí enfatizó en el déficit de profesionales contratados por ellos que se especializan en adultos mayores.

De acuerdo a lo indicado por el SSM, lo principal es que en los próximos años una mayor cantidad de profesionales se formen en esta área para atender las necesidades de dichos pacientes, que requieren de un tratamiento especial. “La formación de geriatras, tanto a nivel nacional como regional, se hace imperiosa, considerando que las características fisiológicas de los adultos mayores, su vulnerabilidad frente a los procesos de enfermedad aguda o crónica, son diferentes a los otros grupos y por lo tanto requieren de un trato diferenciado y acciones sanitarias distintas a la de los adultos”, explicaron desde el Servicio.

En Chile, de acuerdo a la médico geriatra Marilú Budinich, no hay más de 50 especialistas en el tema, quienes por su formación atienden de manera integral a los adultos mayores. “Nos encargamos no sólo de los problemas médicos del adulto mayor, sino de la repercusión sobre sus habilidades cognitivas y entorno social. Más que curar una enfermedad, tratamos que se mantenga lo mejor posible”, explicó.

Budinich señaló que el geriatra debe conocer patologías frecuentes de esa edad, como las respiratorias, cardiovasculares, traumatológicas y mentales. “Debemos priorizar. Si tengo un paciente con 25 problemas, debo ver qué es más importante abordar para mantenerlo bien”, sostuvo.

Los alumnos de la Escuela de Medicina de la Universidad de Talca, por ejemplo, tienen ramos sobre medicina interna donde se toca el tema de la geriatría, lo que es parte de su formación integral como médicos.

MEDICINA PREVENTIVA

En este mismo sentido, la Organización Panamericana de la Salud, señala que Chile, debido a su alto crecimiento de la población adulta mayor, tiene como desafío actuar de manera inmediata para mejorar el acceso a la medicina preventiva para las personas de la tercera edad y adecuar los servicios de salud a las demandas crecientes de la salud de estas personas.

Roberto del Águila, representante de esta organización en Chile, dice que se requiere una reconversión de los servicios de salud en el primer nivel, que no sean sólo materno infantil y se enfoquen en el adulto mayor. “Lo mismo con la salud mental, no se trata sólo de psiquiatras, sino de psicólogos que los ayuden con problemas cotidianos y hagan seguimientos para evitar niveles de depresión severa”, indica.

Ante este escenario, desde el Servicio de Salud del Maule se señaló que “es necesario preparar el futuro de la oferta de profesionales formados para la red pública de salud, especialmente en esta área, la que demandará un alto número de acciones tendientes a satisfacer las necesidades de atención sanitaria que requiere este grupo especial de personas”.

ENFERMEDADES PRINCIPALES

¿Cuáles son las principales enfermedades que aquejan a la población adulto mayor del Maule? Años atrás las enfermedades respiratorias para ellos eran mortales. Hoy eso ha cambiado en un porcentaje importante, principalmente gracias a las políticas de vacunación contra la influenza y la gripe, para la tercera edad; la mejora en su alimentación y el acceso a la salud.

Hoy los riesgos principales de mortalidad se han centrado en otras enfermedades como el cáncer, la diabetes y enfermedades coronarias. El libro publicado por especialistas de la Universidad de Talca, “Atlas de la mortalidad en Chile”, explica y estima los riesgos de mortalidad de diversas enfermedades que sufren las personas del país, en las distintas comunas. A pesar que este estudio no se centra específicamente en la tercera edad, de acuerdo a la investigadora principal del Atlas, profesora Gloria Icaza, ésta es la población más expuesta a estos riesgos.

“Los mapas muestran enfermedades en las que se aprecian grupos de comunas con mayor riesgo de muerte que otras, pero no necesariamente indican un mayor riesgo de contraer una enfermedad o incidencia, sino que pueden reflejar otros factores, como el acceso a servicios de salud, ya sea para evitar la enfermedad, diagnosticarla precozmente o tratarla oportuna y apropiadamente. Estos mapas evidencian inequidades en la mortalidad, que se deberían traducir en el diseño de intervenciones de salud pública orientadas a reducir la mortalidad evitable”, sostuvo Icaza.

Específicamente la Región del Maule tiene un mayor riesgo de mortalidad de cáncer de estomago en hombres y mujeres, dentro de las comunas con más alto riesgo están Curicó, Talca y Linares. En el caso de de enfermedades isquémicas del corazón (infartos) las mujeres de la región presentan un mayor riesgo, en especial en comunas como Parral.

Otras enfermedades de alto riesgo son las cerebrovasculares, que se presentan mayoritariamente en las comunas de Molina, San Javier, Cauquenes y Parral.

El libro, de acuerdo a la profesora de la UTalca, fue publicado con el propósito de proporcionar una distribución geográfica de las 16 primeras causas de muerte en Chile, en el período 2001-2008, a nivel comunal y por género, y forma parte de un Programa de investigación de Excelencia Interdisciplinaria de Envejecimiento Saludable de la casa de estudios. (http://www.pieies.utalca.cl/atlas.php).

SALUD BUCAL

Otro aspecto a cuidar en la salud de los adultos mayores es el tema dental. Las caries y la enfermedad periodontal o de las encías, son los principales problemas que enfrentan las personas de edad avanzada, de acuerdo a la especialista en odontogeriatría de la Universidad de Talca, Soraya León.

La académica sostuvo que estas enfermedades pueden llevar a las personas a la pérdida de dientes, impactando directamente en su calidad de vida, ya que afectan la masticación, fonación (emisión de sonidos) y estética.

“En los adultos mayores existen diferentes factores que propician esta situación, como la presencia de enfermedades crónicas, por ejemplo, la diabetes mellitus. También los tratamientos farmacológicos indicados para tratar las enfermedades crónicas, producen disminución de la secreción salival, lo que disminuye una de las principales defensas frente a enfermedades bucales, como es la saliva”, comentó la especialista, quien sostuvo que existen otros problemas como la artritis, que aquejan la capacidad motriz de las personas, dificultando una buena higiene bucal.

En relación a la caries, León explicó que existe un tipo que es el más común en las personas de edad avanzada, denominada caries radiculares, que están ubicadas en la zona de la raíz del diente. “Estas se producen porque a esa edad hay mayor retracción de las encías producto de la enfermedad periodontal, del bruxismo, mala higiene bucal, consumo de alimentos adhesivos y cariogénicos como los hidratos de carbono simples, todos los cuales propician la aparición de esta patología”, manifestó.

Otra de las patologías que se observa a esta edad se denomina Estomatitis Subprotésica, que es una inflamación de la mucosa bucal, ubicada bajo las prótesis dentales, y que se asocia principalmente a una mala higiene de la prótesis o a un desajuste de ellas, debido a un uso más allá del tiempo indicado (más de 5 a 6 años), entre otras causas.

La investigadora de la UTalca destacó que, en general, en la población hubo un cambio en la percepción sobre salud bucal, ya que antiguamente se pensaba que con el envejecimiento era normal perder dientes, pues se asociaba envejecimiento con enfermedad. “Los adultos mayores hoy son personas cada vez más informadas y con un mayor nivel educacional. Por otra parte, las nuevas generaciones de adultos mayores han envejecido en una sociedad con mejores medidas sanitarias, dentro de ellas el uso de los fluoruros en las pastas dentales o a través del agua potable, que influye en una mayor conservación de dientes, además de la evolución que ha sufrido la Odontología en los últimos años hacia una disciplina más conservadora y no mutiladora”, explicó Soraya León.

Actualmente, Chile cuenta con un Programa GES de 60 años de Salud Oral, pero que está destinado exclusivamente a personas de esa edad y no más. “Esto deja sin cobertura a la gran mayoría de los adultos mayores de nuestro país, correspondientes a aquellos que están entre los 79 años y más, de los cuales se predice que serán el grupo etario que más crecerá en los próximos años en todo el mundo”, manifestó la odontogeriatra, quien participa en la actualización de la Guía Clínica GES en Salud Oral Integral para Adultos de 60 años, del Ministerio de Salud.

PREVENCIÓN

El Ministerio de Salud convocó a una mesa de expertos para abordar el tema y se está trabajando para que este programa tenga un enfoque preventivo, en base a medidas de educación en salud bucal, uso de fluoruros y educación en estilos de vida saludables, entre otras medidas. “El mensaje principal y el nuevo enfoque es que la prevención en salud bucal aun es posible en la vejez, permitiendo así una mayor cobertura del programa”, explicó la especialista.

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