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Con la incorporación oficial de los tres directores nombrados por la presidenta de la República, Michelle Bachelet, a la Junta Directiva, se dio inicio a una nueva etapa dirigida a consolidar el proceso de desarrollo para alcanzar el carácter de universidad compleja que persigue nuestra Corporación.
Al órgano rector de la Universidad se sumaron el ex ministro de Economía y director del Consejo para la Transparencia, Alejandro Ferreiro; el ex intendente y ex fiscal regional del Maule, Fernando Coloma, y el actual director nacional del Programa de Televisión Digital de la Subsecretaría de Telecomunicaciones, Rodrigo Ramírez. “De esta forma se consolida la integración definitiva de la Junta, con personas que tienen una larga experiencia en sus profesiones y campos disciplinarios y que han sido un aporte muy positivo para el país”, destacó el rector Álvaro Rojas.
Los tres nuevos integrantes de la Junta permanecerán en sus cargos hasta que cuenten con la confianza de la Primera Mandataria, igual como ocurre en todas las universidades estatales que conforman el CUECH. Es así como la entidad, que se reunió en el Campus Santiago el pasado viernes, quedó integrada por Jorge Awad (presidente) y Juan Franco de la Jara (vicepresidente), y como parte de ella el ex decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales, Jorge del Picó y los también académicos Jorge Retamales de la Facultad de Ciencias Agrarias y Guillermo Schmeda del Instituto de Química de Recursos Naturales. La secretaria general es la académica María Fernanda Vásquez.
Al término de la cita, el rector Rojas destacó el trabajo propositivo realizado en el máximo órgano, “siempre favorable al proyecto corporativo de excelencia, calidad, exigencia y sobretodo preocupada en darle estabilidad financiera a nuestra Corporación”.
Cabe recordar que la Junta Directiva es la más alta instancia de la Corporación que tiene, entre otras responsabilidades, la aprobación del presupuesto anual y sus modificaciones, la misión de fijar la política global de desarrollo de la Institución, el nombramiento de los directivos superiores y validar sus estructura orgánica, así como definir los planes de mediano y largo plazo destinados a materializarla, entre otras facultades.
