“La dedicación literaria ha sido la pieza esencial de mi vida”

9 Septiembre 2011

Tanta fue la sorpresa de Sergio Ramírez Mercado, al recibir la llamada a través de la cual se enteró que era el ganador del Premio Iberoamericano de Letras José Donoso 2011, que perdió su concentración.

“Me sacó agradablemente de mi rutina. No creo que pueda seguir escribiendo el resto de la tarde, pero la pierdo dichosamente”, confesó el escritor, sin ocultar su alegría desde la Villa Serbelloni (Bellagio, Italia), centro para artistas, escritores y científicos de la Fundación Rockefeller. Curiosamente, en ese lugar Ramírez se encuentra realizando la misma pasantía que, en su momento, realizó el desaparecido escritor chileno.

Ramírez admitió sentirse especialmente emocionado de que su nombre quede ligado al de una figura de la talla de Donoso, así como de los destacados escritores que han obtenido este galardón en años anteriores. “Cuando uno pasa a esa clase de altares, siente que le quedan cortas las vestiduras, pero estoy muy contento de pasar a formar parte de un grupo tan selecto. Recibo un gran honor al encontrar un lugar entre ellos”, afirmó.

“José Donoso, a quien conocí personalmente, es un escritor que admiré mucho desde la lectura de ‘Coronación’, una novela moderna, temprana de lo que iba a ser la historia de América Latina en la literatura. Luego, siempre leí con avidez sus novelas, ‘El obsceno pájaro de la noche’ y hasta ‘Donde van a morir los elefantes”, recordó.

Para Centroamérica Nacido en Nicaragua y de profesión abogado, Ramírez comenzó su carrera a los 17 años, cuando escribió un libro de cuentos. A la fecha, suma más de cuarenta escritos, entre novelas, ensayos, biografías y libros, que se han traducidos a más de 15 idiomas.

“Mi compromiso con la literatura es de adolescente. Comencé muy joven y la dedicación literaria ha sido la pieza esencial de mi vida, a pesar de que he vivido otras circunstancias: revoluciones en mi país, cambios de los cuales he sido protagonista. Pero nada sustituye en mí el oficio literario”, explicó.

Tal vez por ese compromiso es que Ramírez estimó que, más que un premio a su trabajo, este galardón viene a representar una suerte de reconocimiento a las letras centroamericanas. “Para mí significa un reconocimiento a la literatura centroamericana, que es una literatura, yo no diría marginal, pero que no está siempre a la luz pública. Es una literatura con clásicos del siglo pasado, pero con muchos jóvenes ansiosos de buscar nuevos rumbos”, comentó.

Su mérito “De tropeles y tropelías”, “Mil y una muertes” y “La fugitiva”, son algunos de los numerosos títulos surgidos de la pluma del nicaragüense. Su designación como ganador del Premio José Donoso la dio a conocer la semana pasada el jurado internacional del galardón, compuesto por Peter Schultze-Kraft, Traductor de Literatura Latinoamericana en Lengua Alemana; Carmen Gómez García, Profesora de Lengua y Literatura, Universidad Complutense de Madrid; Monika Wehrheim, Profesora de Literatura Hispanoamericana, Universidad de Bonn, Alemania; Cecilia García Huidobro, Decana de la Facultad de Comunicación y Letras de la Universidad Diego Portales; Juan Durán-Luzio, Ensayista y Profesor de Literatura Hispanoamericana, Universidad Nacional de Costa Rica, y el profesor de Literatura de la Universidad de Talca y coordinador del galardón, Javier Pinedo.

Respecto a los motivos que llevaron al comité a premiar el trabajo de Ramírez, Pinedo explicó que junto a sus vastos méritos literarios, también se consideró el “contexto moral y ético en el que se enclava su obra”.

El Premio Iberoamericano de Letras José Donoso fue instituido el año 2001 por la Universidad de Talca en memoria del destacado escritor chileno -vinculado por sus raíces familiares y culturales a la Región del Maule-, con el auspicio de Santander Santiago, entidad que entrega al ganador un premio de US$ 30.000 (treinta mil dólares).

Sus obras
Novelas: Tiempo de fulgor, 1970; ¿Te dio miedo la sangre?, 1977; Castigo divino, 1988; Margarita, está linda la mar, 1998; Mil y una muertes, 2004; y, recientemente, La fugitiva, 2011.

Cuentos: Cuentos, 1963; De tropeles y tropelías, 1971; Charles Atlas también muere, 1976; Juego perfecto, 2008; Perdón y olvido, 2009.

Ensayos, testimonios y memorias: Mis días con el rector, 1965; El pensamiento vivo de Sandino, 1975; Hombre del Caribe, 1977; Estás en Nicaragua, 1985; La marca del Zorro, 1989; Adiós muchachos. Una memoria de la revolución sandinista, 1999; Mentiras verdaderas, 2001; Tambor olvidado, 2007.

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