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Los peligros de la radiación solar

Uno de los cuidados importantes no sólo en vacaciones, sino todo el año, debe ser el de la piel frente a la exposición al sol. Los médicos señalan que ha habido un aumento de la radiación solar y por lo tanto, las personas no deben exponerse entre 11.00 y 16.00 horas, y los niños menores de dos años deben evitar el sol.

El cáncer a la piel más agresivo, el melanoma, puede resultar mortal si no se descubre ni trata a tiempo y su tasa de incidencia es de 3,7 por cada 100 mil habitantes, por lo tanto en la región es esperable que haya alrededor de 37 casos al año.

Otra recomendación es la revisión periódica de los lunares. Si un lunar crece rápidamente, cambia de color o tiene dos o tres colores, incluyendo hasta cicatrices, lo más probable que sea un melanoma.

En los últimos cinco años la tasa de cáncer a la piel en Chile aumentó de 20 a 25 casos por cada 100 mil habitantes, ubicándose en el tercer lugar del cáncer más común en nuestro país.

DAÑO ACUMULATIVO

Si una persona está expuesta al sol desde los primeros cinco años de su vida, tendrá un daño acumulativo irreversible. Por ello es que resulta fundamental cuidarse desde muy pequeño y se recomienda evitar exponer al sol a menores de dos años.

Existe tratamiento quirúrgico para los melanomas, que consiste en la extirpación completa, mediante distintas técnicas.

LOS LABIOS

Junto con proteger la piel, también hay que cuidar la boca, puesto que el cáncer de labios, ha ido en aumento en las últimas décadas, «a raíz del debilitamiento de la capa de ozono y es de vital importancia que la población tenga conciencia sobre el daño que provoca la sobreexposición al sol, para que prevengan a tiempo”, explicó la dermatóloga Rosario Alarcón, docente de la Facultad de Medicina de la Universidad de Concepción. «No podemos ignorar que en nuestro país estamos expuestos a mayor radiación solar, por lo que toda protección y prevención es muy necesaria”.

La directora del grupo de investigación en cáncer labial y docente de la Facultad de Odontología, de la Universidad de Concepción, Gina Rojas, explicó que se han realizado jornadas con el fin de “crear conciencia sobre la importancia de proteger los labios, especialmente el inferior que recibe sol directamente”.

En ese sentido, indicó Rojas, en la Facultad de Odontología de la UdeC “las investigaciones realizadas los últimos años, reflejaron que siete de cada 10 personas que trabajan al aire libre tienen lesiones labiales premalignas y de ellos, uno de cada 10 puede desarrollar un cáncer”.

La profesional aseguró que es primordial “educarse para protegerse efectivamente del sol. Sobre todo aquellas personas más susceptibles a desarrollar lesiones, es decir, aquellas que se exponen al sol en el horario de mayor radiación (11.00 y 16.00 horas); presentan problemas del sistema inmune, debido a que están tomando medicamentos inmunosupresores o fotosensibilizantes y fuman o beben en forma frecuente”.

Para prevenir el cáncer labial, lo primero es usar un gorro de ala ancha, aplicar continuamente bloqueador solar específico para labios factor 30 o más, buscar la sombra y evitar exponerse al sol en los horarios de mayor radiación, especialmente en las épocas de primavera y verano, enfatizó la doctora Rojas.

Para el director de la Escuela de Medicina de la Universidad de Talca, Claudio Cruzat, «el cáncer de piel, afecta a sus dos componentes: la epidermis, la capa más superficial; y la dermis, más profunda. En cualquiera de ellos se puede originar un tumor maligno. Incluye varios subtipos, con diferentes maneras de presentarse, de acuerdo a la edad.

«La mayoría está en relación al efecto dañino de la luz ultravioleta. Los tipos más frecuentes son tres: el carcinoma basocelular, el espinocelular y el melanoma maligno, siendo el más frecuente el basocelular. Lo sigue en frecuencia el espinocelular. El melanoma es tal vez el que más reconoce la gente, son las lesiones que llamamos nevus o lunares, o pecas. Se origina en células pigmentadas. Son los menos frecuentes, pero los más letales, por lo tanto son de particular preocupación», aseguró el profesional.

El carcinoma basocelular, aunque es el que más se repite, es el menos agresivo. Cruzat explicó que prácticamente no mata, porque no da ramificación, solo se desarrolla en forma local. «El carcinoma espinocelular es un tumor bastante agresivo pero dependiendo de su subtipo; ambos pueden presentarse como lesiones ulceradas o tipo nódulo, de lento crecimiento, que incluso pueden sangrar. Y el melanoma maligno, relacionado a pecas o lunares, si bien ha aumentado en la población, sigue siendo el de menor frecuencia, pero es bastante letal, sobre todo si se pesquisa tardíamente».

El director de la Escuela de Medicina de la U. de Talca, explicó que la edad de presentación también varía. «El cáncer basocelular y espinocelular son tumores que en general se ven en gente sobre los 40 años; el melanoma maligno se ve en el adulto mayor pero también en jóvenes, incluso en niños».

Como los tres tipos de cáncer a la piel tienen que ver con la radiación solar, ocurren mayormente en zonas del cuerpo más expuestas a la luz del sol, como el rostro, manos, escote, cuello, extremidades, etc., por lo mismo es tan importante evitar tomar sol.

El doctor Cruzat explica que estos tumores aparecen con más frecuencia en personas de piel blanca, «lo que no quiere decir que no se produzca en gente de tez oscura… lo que hay que hacer es evitar las horas más peligrosas del sol (11.00 a 16.00 horas) y usar sombreros, quitasol y bloqueadores solares. Exponerse a luz ultravioleta en cámaras o camillas, eso es aún más peligroso».

ALIMENTOS

Entre otros cuidados para prevenir el cáncer, el consumo regular de frutas y hortalizas puede ayudar, ya que causa un efecto protector, especialmente por su contenido en compuestos con actividad antioxidante. Su ingesta retarda el envejecimiento y previene el desarrollo de algunos tipos de cáncer). Investigaciones realizadas en manzanas, muestran un mayor contenido de compuestos fenólicos y de actividad antioxidante en la piel y en estados de desarrollo temprano del fruto. Adicionalmente se han reportado efectos beneficiosos para la salud de otros alimentos que contienen moléculas bioactivas, como el tomate, el maqui, frutilla, frambuesa y kiwi, entre otros.