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Con la incorporación de la automatización tecnológica a los procesos productivos se reemplazarán empleos, pero surgirán otros y se potenciarán habilidades humanas como el pensamiento crítico y la empatía
15 Octubre 2019
Fundado o no, está en discusión, pero el temor persiste sobre el reemplazo de los trabajadores por tecnología en los procesos productivos. Esta fue la temática que se trató en el seminario “Transformación Digital; Inteligencia Artificial y MiPymes”.
El encuentro reunió a destacados especialistas en el tema con estudiantes, académicos y empresarios. Fue organizado en el marco de los 15 años de la Escuela de Ingeniería de Informática Empresarial.
Entrando en la discusión de fondo, John Atkinson, doctor en Inteligencia Artificial (IA), explicó que “la tecnología está y va a seguir reemplazando trabajos que hacen las personas, pero esto no es tan malo como la gente se imagina porque a la vez aparecen nuevos empleos, entonces hay que estar preparado, ser más proactivo, adelantarse, capacitar a la gente no en los empleos de ahora, sino en trabajos nuevos”.
Observó que ello “no está pasando”, porque “por ejemplo SENCE está capacitando en cosas añejas, enseñar programación es importante, pero vienen otros tipos de trabajo en el futuro cercano, entonces hay que preparar a los jóvenes para lo que viene. Hay falta de capacitación en automatización tradicional, lo que ahora está, pero esto es diferente, es capacitarse para un trabajo que aún no existe”.
El académico agregó que “existe una desvinculación entre la academia y las empresas, un problema endémico en Chile, por lo cual tiene que haber incentivos porque las empresas están comprando estos servicios afuera”.
Fortalecer habilidades humanas
Junto con la creación de nuevas funciones y roles para las personas, la creatividad, empatía y pensamiento crítico son tres habilidades humanas que tenderán a fortalecerse en este contexto de híper automatización.
“El Foro Económico Mundial destaca la necesidad de entrenar y capacitar a la gente en IA y para los nuevos trabajos que están emergiendo, los cuales van a exigir nuevas habilidades para las personas como, entre otras, el pensamiento crítico, más crítico de lo que se enseña en la universidad, porque por ahora, son cosas que todavía dependen del ser humano; la creatividad, las máquinas aun no llegan a niveles de creatividad de nosotros y los temas de empatía todavía están asociados a la calidad humana”, puntualizó el académico.
Por su parte, Sabino Rivero, director de la Escuela de Ingeniería Informática Empresarial, señaló que “en la última modificación de los planes de estudio, el año 2015, nosotros como carrera incorporamos una línea de innovación y de inteligencia de negocios, que incluye el análisis de grandes volúmenes de datos, lo que falta es ahondar un poco más en el tema de aprendizaje de máquinas y la inteligencia artificial, pero estamos formando en la incorporación de tecnología”.
Experiencia de las Pymes
En la ocasión, se expuso algunos de los resultados de un proyecto FONDECYT ejecutado por la mencionada Escuela, que consistió en la incorporación de tecnología básica a 10 pequeños restaurantes de Talca, concluyendo que una de las falencias es la falta de formación de los trabajadores.
Alejandro Cataldo, doctor en Ciencias de la Ingeniería y académico de la Escuela de Ingeniería Informática Empresarial, adelantó que “lo que hicimos con los pequeños restaurantes fue incorporarlos en algo que los grandes restaurantes ya hacen hace mucho tiempo. La gente enfrenta el cambio con la idea que la tecnología los puede reemplazar, pero lo que nosotros aprendimos con esta experiencia es que los trabajadores se benefician de la tecnología porque mejoran su rendimiento, disminuyen conflictos, entre otras ventajas”.
