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La Institución cuenta con un nuevo instrumento para hacer frente a la violencia de género y a la discriminación arbitraria. Se trata de la nueva Política de Género que busca crear y consolidar buenas prácticas y una cultura de igualdad.
La Política de Género, se hace cargo de los compromisos asumidos por el Estado en diversos tratados internacionales como la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer; en la que se aboga y se insta a todas las instituciones públicas a hacerse cargo de este tema.
María Fernanda Vásquez, secretaría General y quien lideró la iniciativa, expresó que “este trabajo se inició desde octubre del año pasado y fue recogido por el programa de gobierno del actual rector, de manera que lleva un trayecto bastante largo que coincide con las demandas estudiantiles en algunos puntos”.
Según explicó Vásquez, la nueva Política de Género “se hace cargo de tres tópicos: la no discriminación por género, la no violencia de cualquier tipo por género; y las buenas prácticas, también entendidas desde el enfoque de la convivencia y diferencias de género”.
Política de Género
De esta manera, la Institución adopta esta política que “propende a la eliminación y sanción de toda conducta constitutiva de discriminación arbitraria de género, violencia o acoso sexual cometida en el contexto de la actividad universitaria”, según consigna el documento. En el texto también se indica que “tiene por finalidad la creación y/o consolidación de buenas prácticas y de una cultura de igualdad universitaria entre los distintos géneros”.
