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Seminario presentó experiencias de jóvenes emprendedores

Atreverse, sin temor a equivocarse porque cometer errores es parte del proceso. Esa fue una de las lecciones que entregaron tres jóvenes profesionales que relataron experiencias exitosas en innovación y emprendimiento, ante un numeroso grupo de estudiantes de la Facultad de Ciencias Empresariales (FACE) y de otras áreas.

El público estudiantil siguió con interés las exposiciones de las invitadas, Daniela Barrera, de Efecto Educativo; Javiera Echenique, de Crystal Lagoons, y Beatriz Hamilton, de Innovación de Transforme.

La actividad —organizada por el Centro de Desarrollo Empresarial (Cedem) de esa Facultad y la Vicerrectoría de Innovación, Desarrollo y Transferencia Tecnológica— contó con la participación de la Vicerrectoría de Desarrollo Estudiantil, a través de la Dirección de Apoyo a Organizaciones Estudiantiles.

La jornada se concretó en función de los convenios de desempeño con el Ministerio de Educación, que financia las iniciativas involucradas en ellos.

Según el director del Cedem, José Tello, este Centro se basa en el modelo de innovación y competencia que se promueve a nivel nacional a través del gobierno y a nivel mundial a través de universidades de vanguardia como Harvard, el MIT y Boston College.

“Nuestra idea es convertir a la Facultad de Ciencias Empresariales en el referente de la innovación y el emprendimiento tanto en la universidad como en la región y convertir el Cedem en la plataforma base para poder lograr este objetivo”, resaltó.

Estudiantes Emprendedores

Respecto a la actitud de los estudiantes frente a la cultura de la innovación y emprendimiento, el académico afirmó que hay un proceso de cambio. Y en la medida que empiecen a penetrar los nuevos ambientes, se espera que los estudiantes, al egresar, “no estén pensando exclusivamente en ser empresarios, sino en ser emprendedores”. En relación a esta diferencia, sostuvo que “ser emprendedor no necesariamente significa crear empresas, sino soluciones, las que no solo pueden ser un negocio, sino también tener un beneficio social. Ese es nuestro objetivo y vemos que los estudiantes de a poco están cambiando el perfil en términos del futuro que desean cuando egresen de nuestra Universidad”.

En tanto, el vicerrector de Innovación, Desarrollo y Transferencia Tecnológica, Gonzalo Herrera —quien inauguró la actividad— dijo ser testigo de que nuestra Corporación es una universidad innovadora y capaz de enfrentar grandes desafíos. “La Universidad de Talca promueve un tipo de innovación que es característica de las universidades: la innovación basada en ciencia y tecnología, una de las formas más ricas de innovar”, enfatizó.

Agregó que el resultado de la innovación y desarrollo, es posiblemente lo más perdurable, lo que cala hondo en un país. “Un camino de crecimiento en todo sentido es el de la innovación porque de esta forma se va cambiando el mundo”, argumentó.

A su vez, el seremi de Economía, Ricardo Alcérreca, observó que la innovación y el emprendimiento no solo deben abordarse desde el punto de vista productivo. “Me alegro que la Universidad esté en esto y que no solo esté preocupada de enseñarlo, sino de practicarlo”, expresó.

Soluciones Educativas

A la experiencia de su empresa, Efecto Educativo —de la que es subgerente comercial— se refirió Daniela Barrera, quien narró cómo surgió este emprendimiento que hoy ofrece desde pizarras interactivas, hasta laboratorios de innovación para dar respuestas pedagógicas a partir de las necesidades educativas.

“Innovar en educación es atacar los problemas que afectan a las personas en su proceso de aprendizaje”, precisó. A su juicio, crear ambientes de innovación implica empatizar con el público objetivo, ponerse en el lugar del otro y definir el problema para generar luego una idea, el prototipo y testear con el potencial usuario.

“Hay que tratar de equivocarse lo más rápido y barato posible. Equivocarse es parte del proceso, de la cultura de emprendimiento”, sostuvo.

Aguas Cristalinas

La segunda expositora del seminario, Javiera Echenique, ingeniera en biotecnología e integrante del staff de investigadores de Crystal Lagoons, relató la experiencia de Fernando Fischmann, creador de la gran piscina de San Alfonso del Mar, en Algarrobo, Región de Valparaíso.

Su perseverancia le permitió resolver los problemas de tratamiento del agua que por algunos años enturbiaron su proyecto, y hoy ha desarrollado sus grandes lagunas de aguas turquesas a distintos puntos del planeta. “Es una tecnología no disponible en Chile ni en el mundo, sustentable y eficiente, y que hoy está patentada en 170 países”, contó Echenique.

La proyección es desarrollar 14 mil proyectos en los próximos 5 años. Pero además de las piscinas de uso recreativo, también el sistema se aplica con fines industriales. Así es posible resolver, por ejemplo, la contaminación generada por las plantas termoeléctricas.

Finalmente, Beatriz Hamilton, consultora de Innovación de Transforme, afirmó que el desarrollo de una idea que nadie va a usar en nada, no es innovación, sino un invento. “Innovación tiene que ver con resultados concretos y tangibles”.

Destacó varios casos que muestran innovación en herramientas y procesos, aplicados a negocios, por ejemplo bodegas y tiendas. Explicó que la innovación es un proceso que debe ser administrado en las empresas, ser parte de sus estrategias funcionales, lo que implica atreverse a romper paradigmas y convocar a todos los miembros de la organización.