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UTALCA Campus Linares trajo a reconocidas expositoras para tratar el rol de la evaluación formativa

Hasta el auditórium de la Universidad de Talca Campus Linares llegaron alumnos, académicos y docentes para escuchar y aprender de dos grandes expositoras del ámbito educacional: Jacqueline Gysling y Mimi Bick.

A través de una mesa redonda en la que participaron las invitadas junto al decano de la Facultad de Ciencias de la Educación, Cristian Rojas, se trató el rol de la evaluación formativa y cómo puede utilizarse para fomentar el desarrollo de competencias.

“La evaluación formativa es una corriente con varios enfoques. Muchos académicos la están proponiendo hace tiempo. Investigaciones se han asociado a nivel escolar, en menos grado y el ámbito universitario. La idea es cómo usar la evaluación, disociarlos de cierta manera de la calificación y emplearla para que te motive y te sientas involucrado y apoyado a través de la evaluación”, aseguró la Consultora en Educación Internacional, Mimi Bick.

Al respecto Bick agregó que “típicamente en la escolaridad y también en las universidades hemos vivido por mucho tiempo la idea de la evaluación como un castigo. Que es correcto o incorrecto. Donde un 7 es un regalo, un tesoro. Algo para tu ego y un 3 es lo peor, un castigo”, comentó.

Luego de reflexionar sobre los tipos de evaluación que se realizan en el aula, los modelos de base y la necesidad de su integración, las doctoras reflexionaron sobre la importancia de la retroalimentación.

“No es preguntar quién tiene la respuesta de la pregunta 3 y decir ¡no! Era la alternativa C o D. Cuando estamos en diciembre te vas y no leerás nada de lo que está escrito en esa página. ¡No te vas a acordar de lo que estoy diciendo!, sino en algo central que te indica más que nada algo positivo. Lo que se nota que está, no acerca de tu persona, sino tu actuación y desempeño. Lo que escribiste o hiciste. Te digo también donde se puede ir trabajando e indico un camino. Entonces estoy retroalimentando donde estás en tu proceso de aprendizaje con cosas específicas”, afirmó.

Las expositoras enfatizaron que la evaluación no debe ser un asunto final. Puede hacerse al principio, al medio y también al final para fines formativos. Es decir, cerrar la brecha entre donde está y se supone que queremos que se desarrolle tu desempeño.

“Cuando la retroalimentación tenga ciertas características es mucho mayor a otras medidas que se podrían implementar en un aula o sistema. Cuando yo te retroalimento es un evento clave, no al final”, destacó.

EDUCACIÓN UTALCA

Al ser entrevistada sobre el rol de la evaluación formativa, la doctora de origen canadiense Mimi Bick también se refirió a la enseñanza que se imparte en la Universidad de Talca.

“Tiene perfiles de egreso que son de competencias y no de contenidos, de objetivos precisos. El desarrollo de ciertas competencias que los distintos módulos y prácticas que hacen los alumnos contribuyen al desarrollo de ese perfil de competencias. Entonces va a la mano con la educación formativa. Como usamos la información que intencionalmente recogemos en lo que son tus actuaciones de tal manera que podemos retroalimentarte para ir siguiendo ese camino hacia el logro de ese perfil de egreso”, agregó.

“Hablamos del aprendizaje y que sea vivido menos como un castigo o un premio a tu ego y más sobre cerrar la brecha entre cual es el norte, donde vamos con el aprendizaje, en qué está y como cerrar esa brecha o como ayudarte a ir hacia más adelante. Ósea el desarrollo de competencias”, aseguró la doctora de origen canadiense, Mimi Bick.