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Al rescate de la belleza perdida de la madera

Rescatar y crear arte a partir de desechos constructivos, es el desafío que asumió Amelia Errázuriz, esfuerzo que terminó por dar vida a la exposición “Acopios” que estará abierta hasta el martes 1 de octubre en la sala de exposiciones de la Escuela de Postgrado y Centro de Extensión de la Universidad de Talca en Santiago.

La muestra da cuenta de un registro narrativo que se desarrolla en distintos ámbitos y lenguajes; fotografías, dibujos, pinturas, objeto-instalación, que crean una cadena de asociaciones vinculantes. En base a lo anterior, la artista propone un recorrido de relatos, lenguajes, estructuras e imágenes que invitan a la reflexión.

“Me creían loca”, dijo al recordar su periplo por diversas construcciones “rescatando” maderos y escaleras desechados por el personal de las obras, como una suerte de apología a lo que se destruye y no se ve. “Eso en todo orden de cosas es muy importante”, acotó.

“Tengo una escalera que es parte del soporte de la pintura, forma parte de ella. O sea, son elementos desechados que voy buscando, recogiendo de las calles, me paro en todas las construcciones y pregunto por los banquillos usados que después botan o echan a la chimenea como leña. Yo los encuentro, los echo al auto, me creen loca, pero los reutilizo y les doy una significación nueva”, explicó.

Agregó que la idea de esta recolección es dotar de belleza a algo que está muy lejos de ser catalogado como tal y que, al mismo tiempo, es parte de la vida cotidiana. “Hay toda una frontera poética que es muy bonita y que tiene mucho sentido”, planteó.

“Es algo que es tan corriente para nuestra vida y para todos los chilenos. Somos un pueblo lleno de terremotos y hay mucho cambio, siempre hay un muro que se está cayendo, siempre hay que reconstruir. Somos un país que está creciendo y siempre la construcción es parte de nuestra vida y el resto, las basuras, también, por eso busco re-significarlo como algo nuestro”, detalló Errázuriz.

En la oportunidad, la Directora de Extensión, Marcela Albornoz, destacó el proceso a través del cual la artista logra devolverle la dignidad a un material que está destinado a convertirse en desechos.

“Los vuelve a convertir y redescubrir, los rehace y produce una obra de arte, ya sea con la escalera de un maestro, bancos de carpintería, maderos que tenían otro destino y que era imposible que pudieran estar en una obra de arte. Ella los recupera con una técnica mixta con óleo, en la cual en este dialogo entre la madera pintada y las transparencias se genera una obra muy seductora, donde la materialidad recobra vida”, comentó.